14. NÚMEROS PRIMOS

 

Recibí un mensaje. Era una duda que llegaba del pasado. 

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La costumbre, cuando produce su efecto disuasor ante la inquietud, anula la controversia. Os aseguro que no conozco a nadie en el Mundo Reserva que cuestione el nombre numérico de las reservas. Es así, sin más. Pero al leer que alguien se lo ha podido plantear en el pasado, ha obrado en mí la misma inquietud. 

Y sí, todas las reservas tienen un número primo que las define. Precisamente ese tipo de números misteriosos que ha desvelado a científicos como Euclides, Mersenne, Fermat, Fibonacci o Germain. La suerte ha dictado que el número de esta entrega no sea primo. Su valor es divisible, aunque por dos números que son primos, el único par primo existente y el siete. El misterio de los primos como por ejemplo la secuencia de Germain, una serie donde (2p + 1) siempre es un número primo: 2, 3, 5, 11, 23, 29, 41… trasciende al valor en sí. O la secuencia de Fibonacci en dónde cada número es la suma de los dos anteriores, pero una secuencia plagada de números primos. Secuencias de primos llamados cuádruples, grupos de 4 números primos donde la diferencia entre ellos es de 2 (el único primo par) como 5,7,11,13, o la 11, 13, 17, 19, otras como 101, 103, 107, 109. ¿Alberga alguna explicación qué se llamen por un número primo todas las reservas?  Seguro que sí. Solo los Emancipados podrían darme una respuesta. Pero, que yo sepa, todavía no he contactado con ninguno. 

Lo siento, aún no tengo perspectiva suficiente. En esta mi huida en el Mundo Reserva llevo pocas reservas visitadas, de las que todavía no hablé. Preferí descargar la entrega del relato que encontró el ciberanticuario sobre la reserva 257. El insistió. Me dejé convencer, impactado con lo que leía. Ignoraba que existiera este lugar, una isla perdida. Prometo que cuando os haya entregado todos los capítulos sabréis de mis vivencias en la reserva 17. Vendrán otras, si no me apresan o me retienen las circunstancias. Me han hablado de la reserva 89, dónde tienen su sede los Emancipados. Me inquieta las noticias que recibo de allí, y me despierta la curiosidad de manera extraña. Tan es así que busqué planos de las infinitas reservas para tener una foto de todo lo que me queda por recorrer para poder llegar a ese lugar.

         No tardaré en entregar más descargas de la 257. Esa limpieza social por razón de edad es muy angustiante y requiere una denuncia. Saber que existe ese lugar así me conmueve. La impotencia que me provoca solo la puedo desahogar enviándolo al pasado, por si se logra revertir este destino.  Tiene que haber otro futuro, desconocido, mejor.

         Os tengo que dejar. Hasta pronto.